Sabemos que caminar es una manera de ejercicio muy buena para nuestro cuerpo, pero un estudio de la Universidad de Princeton muestra que, además de que esta actividad te hace más feliz, también tiene la capacidad de regenerar el cerebro.

¿Cómo es que pasa esto? Bueno, lo que sucede según los resultados de este análisis, es que caminar mejora el mecanismo de inhibición que evita que las células nerviosas se vuelvan hiperactivas, y esto hace que el cerebro descanse y que sus neuronas enfrenten mejor y con menor estrés los problemas cotidianos. Es decir, determina de alguna manera su funcionamiento a futuro y cómo actuarán sus células.

Ahora, esto se potencia si la caminata se hace en la naturaleza, pues la relajación aumenta en estos lugares y la mente entra en una especie de estado de meditación.

Así que, por este y muchos más motivos, contar con espacios verdes en las ciudades es elemental. Ven a caminar al Bosque de Chapultepec, hay rutas y calzadas llenas de historia.